Con motivo de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, la defensora general de la Nación, Dra. Stella Maris Martínez, realizó el día de ayer una exposición dentro del Ciclo de Conferencias Magistrales en Derecho Internacional y Derechos Humanos de la Asociación Interamericana de Defensorías Públicas (AIDEF) y el Ministerio Público de la Defensa (MPD) en la que repasó las principales iniciativas de género del organismo que conduce. Además, participó del encuentro “Puertas adentro de nuestras casas”, realizado en la Universidad de Morón en homenaje a la ex jueza de la Corte Suprema de Justicia de la Nación Carmen Argibay, y del acto por el 10° aniversario del Observatorio de Género en la Justicia del Consejo de la Magistratura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, llevado a cabo en la Facultad de Derecho de la UBA.

Durante la conferencia magistral, la defensora general afirmó que “si bien este día es de festejo por nuestros logros, también tiene que ser una jornada universal de lucha para que los derechos de las mujeres se respeten en todos los ámbitos y niveles de la sociedad”. Y agregó que “más allá de tener un discurso políticamente correcto, tenemos que implementar distintas estrategias y mecanismos al interior de las instituciones de justicia para lograr que los derechos de las mujeres no solo sean un slogan, sino que se hagan realidad”. “Esto es una lucha de poder; no es una cuestión de amabilidad. Y el poder no se regala; el poder se pelea”, complementó la propia defensora general durante su intervención en la Facultad de Derecho.

En cuanto a las medidas adoptadas durante su gestión para incorporar la perspectiva de género en el trabajo cotidiano del MPD, la Dra. Martínez destacó la creación de áreas específicas como la Comisión sobre Temáticas de Género y también Programas destinados a brindar asesoramiento, asistencia y patrocinio jurídico tanto a mujeres víctimas de delitos, en particular, el delito de trata de personas; como a aquellas que se encuentran privadas de su libertad. Asimismo, se refirió a las numerosas publicaciones realizadas por el organismo y a las iniciativas de capacitación en materia de perspectiva de género en el ámbito de la defensa pública, adoptadas como obligatorias desde 2009, y a la posterior implementación de la Ley Micaela, destacando que estos cursos tienen el propósito de “generar cambios actitudinales en los hombres y las mujeres”, antes que el de impartir conocimientos. En este sentido, señaló las reformas efectuadas para compatibilizar las responsabilidades familiares y de cuidado de las y los integrantes de la institución, y la incorporación de una licencia específica en los casos de hechos de violencia de género en el ámbito laboral, sumado a la proyección de modificaciones internas para propender a la equidad de género en el acceso de cargos de magistradas dentro del MPD.

La titular del MPD detalló las resoluciones con perspectiva de género que se dictaron en la institución y afirmó que a partir de esas medidas las víctimas de violencia de género, como sujetos especialmente vulnerables, tienen prioridad para recibir el patrocinio que brinda la defensoría. Además, señaló las diversas recomendaciones realizadas a defensores y defensoras sobre el tratamiento de mujeres y personas LGBTIQ+ en contextos de encierro y respeto a la identidad de género, entre otras.

La defensora general luego aludió al litigio estratégico, aspecto que considera uno de los puntos destacados de su gestión. De estos casos paradigmáticos, que se llevan adelante tanto en el ámbito nacional como en el sistema interamericano y universal de derechos humanos, muchos se vinculan a cuestiones de género y refirió al amparo colectivo contra empresas de transporte público de pasajeros que se oponían a contratar a mujeres como conductoras; al logro de la reparación a una víctima de trata con fines de explotación sexual en una causa en la que se condenó civilmente a la municipalidad de Ushuaia; a la estrategia de litigio de apelar todas las medidas de protección recíprocas en procesos de violencia de género, además de a las soluciones de casos alcanzadas en el ámbito internacional.

En alusión a quienes son las destinatarias finales de las políticas de género del MPD, la Dra. Martínez afirmó: “nuestro objetivo no se alcanzará si no logramos que los derechos sean extendidos entre todas las mujeres, especialmente entre las más vulnerables, las que tienen dificultad para acceder a la justicia, porque no conocen sus derechos o porque no saben cómo hacerlos valer.” “Nuestra misión”, resaltó, “es estar junto a todas ellas para luchar cada día por lograr un mundo más igualitario, más justo y donde realmente imperen los derechos humanos de todas y de todos”.