El pasado 11 de febrero el Sistema Interinstitucional de Control de Cárceles realizó un monitoreo en el Complejo Federal de Jóvenes Adultos, cuyo objetivo principal fue verificar las condiciones de vida de los jóvenes adultos privados de la libertad y el estado en el que se encuentra esa unidad penitenciaria. El Sistema estuvo representado por su presidente, el juez Gustavo M. Hornos; Guillermo Todarello, co-titular de la comisión de Cárceles de la Defensoría General de la Nación (DGN) y Cyntia Dettano, integrante de dicha Comisión; el juez Sergio Paduczak; Mariana Lauro y Rodrigo Borda, pertenecientes a la Procuración Penitenciaria; Daniela Gallo de la Procuraduría contra la Violencia Institucional de la Procuración General de la Nación; el jefe de despacho de la Cámara Federal de Casación Penal, Nicolás Herbin; y la secretaria del Sistema, Lucía Gallagher.
Durante la recorrida se visitaron diversos pabellones y se entrevistó a los jóvenes, particularmente a quienes se encontraban sancionados y a aquellos que poseían una medida de resguardo. Asimismo, se presenció la manera que se entrega la comida, evidenciándose la falta de platos y utensilios para servir los alimentos.
En todo momento se señaló la preocupación por la ociosidad de los jóvenes, quienes se encontraban en los pabellones sin actividades de ninguna índole, con ínfimas horas de trabajo. Más preocupante todavía es la situación de quienes se encuentran bajo resguardo de su integridad física, régimen que conlleva la permanencia por más de 20 horas diarias en la celda.
Al finalizar el monitoreo, se conversó con las autoridades del Complejo y los referentes de las distintas áreas, con el objetivo de efectuar observaciones y recomendaciones. Posteriormente, desde la Comisión de Cárceles de la DGN se efectuaron gestiones dirigidas a reclamar arreglos urgentes y entrega de elementos de higiene y de limpieza, así como un mejor equipamiento de los pabellones visitados.
