El pasado jueves egresó el primer asistido por la defensa pública del programa de Justicia Terapéutica para el Tratamiento Integral de Infractores de la Ley Penal con Consumo Problemático de Sustancias Psicoactivas, cuyo principal objetivo es brindar herramientas para insertarse laboral y educativamente a las personas que cometieron algún delito y tienen algún tipo de adicción a las drogas. La asistencia técnica del egresado fue brindada por la Unidad de Letrados Móviles para la Asistencia de personas no privadas de libertad ante los Jueces Nacionales de Ejecución Penal, a cargo de Ximena Figueroa, y fue aplicado por el Juzgado Nacional de Ejecución Penal Nº 5, a cargo de Jimena Monsalve.
El programa de Justicia Terapéutica es impulsado por el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, y es producto del trabajo llevado a cabo con la Secretaría de Políticas Integrales sobre Drogas (SEDRONAR), el Ministerio Público de la Defensa y del Ministerio Público Fiscal, ambos de la esfera nacional. Esta iniciativa de resolución alternativa de conflicto intenta dar una repuesta no penal a la cuestión de la adicción considerándola una problemática de salud y, para ello, requiere del involucramiento de distintos actores además de la supervisión judicial. Experiencias similares ya funcionan de manera exitosa en 16 países de América Latina. En este caso, se adaptó y ajustó a la normativa penal y procesal argentina.