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El Papa Francisco difundió el día de ayer un mensaje grabado en video en el que celebró la inauguración de los talleres de formación y práctica musical que se realizan en el ámbito del Centro Universitario Ezeiza del Complejo Penitenciario Federal I. Estas actividades son impulsadas por el Sistema Interinstitucional de Control de Cárceles, del cual forma parte la Defensoría General de la Nación (DGN) a través de su Comisión de Cárceles. La capacitación en artes y oficios para las personas privadas de su libertad tienen el objeto de mejorar sus condiciones de vida, con vistas a su progresiva integración a la comunidad.

El pontífice calificó a la iniciativa como un “espacio de trabajo, de cultura y de progreso” y como “un aliento de vida”. “Es un signo de humanidad y no podría existir si entre ustedes no hubiera personas de tanta sensibilidad humana, entre los internos, entre los agentes del servicio penitenciario, directivos, jueces, miembros de la Universidad de Buenos Aires y los estudiantes”, dijo y agradeció a los que ayudaron a lograr esta iniciativa.

"Los internos están pagando una pena por un error cometido. Pero no olvidemos que para que la pena sea fecunda debe tener un horizonte de esperanza. De lo contrario, queda encerrada en sí misma y es solamente un instrumento de tortura; no es fecunda", afirmó. "Con este nuevo taller de música están mirando a la reinserción social, con los estudios, con la Universidad de Buenos Aires. Es una pena con esperanza, una pena con horizonte", agregó al dirigirse a los internos.

"Queridos amigos, rezo por ustedes, los tengo cerca al corazón, les pido que no se olviden de hacerlo por mí. Que Dios los bendiga y adelante, siempre con una sonrisa. Hasta el próximo llamado", concluyó su mensaje.

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Acerca del taller
Los organizadores informaron que es la primera vez que funciona un taller de este tipo en la cárcel de Ezeiza. Se realiza en un lugar cerrado donde los detenidos que saben de música se juntaban a tocar, de allí surgió la idea de que ellos enseñen a otros presos que estén interesados en iniciarse en la materia. La actividad cuenta hasta el momento con 27 personas inscriptas y funciona los miércoles y viernes dos horas por día. Si bien en el futuro UBA XXII asignará coordinadores pedagógicos, en el taller no hay docentes, sino que los detenidos intercambian sus conocimientos. También se piensa en convocar a otros músicos para que se sumen a la actividad.

El acto de inauguración del taller se realizó el 10 de agosto, en él participó el defensor público oficial Guillermo Todarello, cotitular de la Comisión de Cárceles de la DGN, junto con otros integrantes del Sistema Interinstitucional de Control de Cárceles.

Estos talleres que se dictan en la unidad penitenciaria de Ezeiza cuentan con el apoyo del Programa UBA XXII de la Universidad de Buenos Aires, cuya directora es Marta Laferriere. UBA XXII dicta carreras de grado y cursos presenciales (actividades de extensión) en establecimientos del Servicio Penitenciario Federal para garantizar el acceso a la formación universitaria curricular y extra curricular de personas que se encuentran privadas de su libertad.