La Comisión de Cárceles de la Defensoría General de la Nación junto con la Procuración Penitenciaria de la Nación y la Dirección Nacional del Servicio Penitenciario Federal, elaboró un Protocolo de actuación para prevenir inconvenientes edilicios en la Unidad Residencial Nº1 y el Centro de Rehabilitación de Drogadependencia del Complejo Penitenciario Federal Jóvenes y Adultos de Marcos Paz.

La difusión del Protocolo tiene la intención de ser una herramienta útil en las labores diarias de las Defensorías. En caso de incumplimiento, se podrá informar a la Comisión de Cárceles para que tome conocimiento del hecho y realice las presentaciones que sean necesarias.

El Protocolo establece la realización de un relevamiento semanal a cargo de la División Trabajo y la División Seguridad Interna del Complejo Federal Jóvenes Adultos, con el objeto de fiscalizar el estado de los distintos alojamientos (celdas y lugares comunes) y así proyectar tareas de mantenimiento (correctivo y preventivo) de la infraestructura edilicia de la Unidad Residencial Nº1 y II. Todo aquel sector que requiera reparaciones será salvado de forma prioritaria dentro de un plazo de veinticuatro horas allí donde el Complejo cuente con los materiales o fondos para su refacción; mientras que, para aquellas situaciones en donde el Complejo no cuente con materiales y/o fondos para su adquisición, la División Trabajo respectiva confeccionará una solicitud de presupuesto que será dirigida y elevada a la Dirección Administrativa.

La Dirección Administrativa, de contar con los recursos, transferirá los fondos correspondientes en un plazo que no podrá exceder los 10 días hábiles. Los organismos de control (Comisión de Cárceles de la Nación y Procuración Penitenciaria de la Nación) se reservan la posibilidad de fiscalizar el procedimiento.

Normalizado el funcionamiento de la instalación se procederá a un control que será llevado adelante por la División Trabajo del Complejo Penitenciario Jóvenes Adultos en forma conjunta con la Comisión de Cárceles de la Defensoría General de la Nación y Procuración Penitenciaria de la Nación. Paralelamente, se realizarán labores de concientización a los internos alojados en la Unidad Residencial Nº1 y II del Complejo en cuanto a implementar una “cultura del cuidado y mantenimiento de las instalaciones provistas por el Estado”.

La elaboración del Protocolo estuvo enmarcada en la resolución del Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional Nº2 de Morón, Secretaría Nº6, la cual ordenó la confección del mismo a partir de la presentación de dos hábeas corpus que tramitan ante la Justicia Federal.

OBJETO

El objeto del Protocolo comprende las siguientes tareas:

Agua: Las labores recaerán sobre cada una de las celdas que lo requieran.
Instalaciones sanitarias (inodoros): Se repararán los que estén obstruidos, como así también se colocarán nuevas válvulas de descarga automática de inodoros en aquellos que los requieran.

Lavabos: Se repararán los que estén obstruidos, como así también se procederá a reemplazar con canillas la salida de agua para aquellos casos que lo requieran.

Duchas: Se procederá al mantenimiento correctivo de aquellas que se encuentran en deterioro parcial como también las que se encuentren inutilizables. Se garantizará el suministro de agua caliente.

Luz: Se garantizará la provisión de luz a través de la colocación de lámparas y portalámparas. Asimismo y, en forma paralela, se procederá a la instalación de equipos de iluminación anti vandálico, empotrados en la pared. También se constatará el estado de las instalaciones eléctricas a fin de garantizar la inexistencia de posibles riesgo.

Otros: Se deberá garantizar una adecuada calefacción y ventilación (aireación) en lugares comunes, como así también toda otra cuestión de infraestructura que haga a las condiciones de alojamiento.