El Programa de Asesoramiento y Promoción de Derechos de las Víctimas del Delito de Trata de Personas de la Defensoría General de la Nación (DGN), comparte un nuevo Dossier sobre trata de personas, esta vez centrado en grupos coercitivos bajo el formato de sectas. Se trata de un modelo de dictamen técnico jurídico creado sobre la base de los que realiza el Programa a solicitud de las Defensorías Públicas de Víctimas y equipos de trabajo que representan a víctimas de trata de personas.
Dichos dictámenes son presentados ante los tribunales intervinientes con la finalidad de emitir una opinión experta sobre la identificación y valuación de daños en casos de trata de personas.
A lo largo del documento, se desarrollan una serie de consideraciones generales sobre el derecho a la reparación integral, la obligación de reparar, los criterios de mensuración y la especificidad de la reparación de la violencia sexual y de las víctimas de trata de personas; en particular, por medio de grupos coercitivos bajo el formato de secta.
Las víctimas de trata de personas presentan características particulares al momento de solicitar o hacer efectiva una reparación. En su casi absoluta mayoría son personas que se encuentran en situación de vulnerabilidad y con poco acceso a recursos económicos, sociales, culturales y simbólicos. Han sido vulneradas en bienes jurídicos trascendentales como la autodeterminación y la dignidad, constitutivos de la personalidad humana. Los dictámenes del Programa de la DGN abordan los daños y perjuicios producto de la trata con criterios flexibles y amplios, desde la comprensión de las realidades de las vidas de las víctimas, y a partir de un enfoque de género y de derechos humanos, respetuoso del interés superior de niñas, niños y adolescentes.
En el documento se describe cómo operan los grupos coercitivos que adoptan la estructura de sectas y los efectos que provocan en sus víctimas, especialmente en aquellas que no se reconocen como tales o que no pueden declarar en contra de los imputados. Ciertos rasgos estructurales están presentes en estos grupos coercitivos, así como un modo de funcionar que los define y les permite realizar sus fines, que se reducen, básicamente, a la explotación de las víctimas. La mayoría de las víctimas ha pasado gran parte de su vida en el seno de la organización coercitiva. Algunas han nacido o se han criado en el ámbito y bajo el dominio de la secta.
De los informes de las y los profesionales que suelen intervenir en estos casos, de estudios mundiales y, fundamentalmente, de los propios testimonios de las víctimas surgen claros indicadores y referencias sobre cómo el sometimiento sufrido implica un daño sobre su autonomía, su autodeterminación y sobre la posibilidad de elegir libremente y concretar un proyecto de vida independiente. En muchos casos, se ha visto afectada la potencialidad para desarrollar su vida profesional, afectiva y emocional.
A partir de un breve repaso sobre las características de los daños identificados en este tipo de casos, el documento se centra en los daños resarcibles y los denominadores comunes que suelen detectarse en este tipo de casos.
El Programa de Asesoramiento y Promoción de Derechos de las Víctimas del Delito de Trata de Personas de la DGN fue creado en 2014. Su función actual es la de brindar asistencia técnica a las defensorías de todas las jurisdicciones y a las restantes dependencias del MPD que lo requieran, en ella se enmarca la elaboración de dictámenes técnicos jurídicos.